SOFÁ NUEVO: Cómo tratarlo
Puede parecer que las reglas de utilización de un sofá son aparentes y sencillas, que lo son, pero esto no nos impide cometer errores que podrían ser fatales a largo plazo. También eran sencillas las normas de mantenimiento de los gremlins y recuerde que Billy tuvo que pagar por el error… De hecho, parece que gremlins y sofás compartan una serie de normas...
Consejos para tu sofá nuevo:
- No dar de comer a media noche (preferiblemente al sofá nunca)
- No mojar
- No exponer a la luz directa del sol
Pero con los sofás nos encontramos con unas cuantas normas más si queremos que la pieza dure más tiempo en condiciones óptimas. Cabe destacar que cada sofá tiene sus propias características y por tanto necesidades, pero, de manera estándar, podemos enumerar una serie de pasos que nos ayudarán a acoger al sofá en su llegada, sin arriesgarnos a que se transforme en una criatura rabiosa, sucia y poco gentil. Como las grandes cosas vienen de doce en doce (doce dioses del olimpo, doce meses, doce apóstoles, doce trabajos hercúleos, doce signos del zodiaco, doce huevos la bandeja del súper) aquí recogemos los 12 consejos para tratar con tu nuevo sofá:
1. Al desempaquetar su nuevo sofá, no use un cúter. Más que por poder asustarlo, piense en que las leyes de Murphy no descansan y podría cortar la tapicería.
2. Quite todos los restos de embalaje como grapas o información adjunta (sin tirar de ella) etc. que pueda incrementar el riesgo, no solo de dañarse usted al levantarlo o moverlo, sino a su nuevo inquilino: el sofá.
3. Es muy posible que su nuevo sofá venga con una almohadilla de plástico en las patas. Si su sofá es de madera y lo va a situar sobre un suelo delicado, deberá colorar una almohadilla de fieltro o de plástico.
4. Con ánimo de evitar dañar el sofá o su entorno, evite desplazarlo arrastrando y levántelo, sin sujetarlo por los cojines para que las costuras no vayan cediendo. Si se trata de módulos encajados, levante cada elemento separadamente y móntelo al final.
5. Recuerde que los brazos han sido diseñados para reposar únicamente los brazos, por lo que podrían no aguantar el peso de todo el cuerpo, llegando a romper la forma del diseño, mover el relleno o reventar las costuras si la presión es excesiva.
6. Los respaldos tampoco son idóneos para el sentado, pues su tapizado no está preparado para soportar dicha presión vertical. En particular, evite sentarse en brazos y respaldos abatibles.
7. Tampoco hay que cargar demasiado el resto del sofá, estar de pie encima del mueble o de rodillas ayudará a que su sofá sea más longevo.
8. Evite rozar el sofá por la parte tapizada contra la pared o suelo para no generar fricciones.
9. Los vaqueros u otros artículos con tejidos teñidos pueden dejar manchas visibles en tapizados claros. Manchas que no se pueden quitar de la mayor parte de tejidos, y en cuero recubierto solo en fase temprana. Tenga también cuidado con llaves, cinturones, ribetes…
10. La luz directa y brillante, tanto del sol como de lámparas alógenas, acelera la decoloración de la piel y el tejido. En este caso son los colores más oscuros los más perjudicados.
11. Si los tejidos son suaves o un mix, pueden aparecer pequeñas pelotillas de tejido, causado principalmente por la ropa y no por defecto del material. Para su desaparición se ha de emplear una rasuradora específica para estas, según acordado por fabricante.
12. Los muebles tapizados son fabricados utilizando materiales blandos y por tanto es imposible una medición precisa. Es importante jugar con unos centímetros de margen en el cálculo del espacio disponible. Esto sucede siempre, a todos los fabricantes y minoristas, por lo que hay que tenerlo en cuenta y actuar con tolerancia conforme a esto.
Tras esta lista, no ha de creer que un sofá es un elemento sumamente sensible, si bien seguir estos consejos puede conseguir alargar la esperanza de vida de su mobiliario. Recuerde que, al igual que las recetas de cocina, usted debe escoger qué grado de obediencia aplicar a las anteriores normas. Desde luego, el seguimiento de estas no va a perjudicarle.
Por nuestra parte, le deseamos que disfrute de su recién adquirido sofá y puedan pasar muchos años juntos.